¿Sabes qué es el ruido mental? Seguro que has oído hablar de él y que, en algún momento de tu vida, también ha aparecido en tu cabeza, incluso es posible que ahora mismo te pases el día pensando un montón de cosas y sientas que, después de tanto pensar y pensar, no logres solucionar lo que te preocupa.

También es posible que, además de pasarte el día dándole vueltas a miles de asuntos, sientas que aumenta tu procrastinación y la desgana de hacer cualquier cosa o de emprender cualquier acción, por mucho que la desees. Si es así, déjanos decirte que es posible que el ruido mental haya llegado a tu vida y esté haciendo mella en tu camino vital, pero no te preocupes, estamos aquí para ayudarte, y por esto hemos escrito este post.

Hoy vamos a hablar del ruido mental y de lo mucho que puede afectar a nuestra vida diaria, incluso sin darnos cuenta, y vamos a ver qué puedes hacer para trabajarlo y conseguir eliminarlo de tu vida. El propósito será eliminar el ruido mental y perseguir la claridad para trabajar el orden interno y llegar a la calma y al equilibrio, que son las bases del bienestar personal por dentro y por fuera. Interesante, ¿verdad?

Así mismo, y antes de empezar, queremos que sepas que en la vida, un 10 % es lo que nos pasa y el otro 90% es cómo reaccionamos a todo lo que nos pasa. Esto es así porque, si consigues controlar tus reacciones y tu actitud ante la vida, consigues controlar tu vida y llevarla como tú quieras. Y es ahí donde puedes eliminar el ruido y dejar paso a la claridad, la seguridad, la confianza y el éxito personal a todos los niveles.

Suena maravilloso, ¿verdad? Pues vamos a enseñarte cómo llegar a ese punto, pero antes queremos compartir contigo un ejercicio tan simple como efectivo para empezar a trabajar en tu ruido mental.

¿Empezamos? ¡Coge papel y boli!

Índice de contenidos del post:

1.¿Qué es el ruido mental?

2. El ruido mental te bloquea y frena tu vida

3.¿Qué dos componentes aparecen en una situación de ruido mental?

4. Motivos por lo que tienes ruido mental

5.¿Cómo influye el ruido mental en tu vida diaria?

6. ¿Puede ser útil esa voz interior? Rotundamente sí

El ruido mental te bloquea y frena tu vida.

Sí, como lo lees; el ruido mental es capaz de bloquear decisiones y acciones, y de frenar tu vida por completo si no le pones solución. Y es que debemos entender que la mente es realmente poderosa, y cuando se llena de pensamientos en bucle que se dan de forma repetitiva, puede llevarnos al bloqueo, al estrés, al cansancio, al desánimo y a la sensación de estar totalmente saturados. Es algo que está realmente a la orden del día y que, incluso, hemos podido naturalizar en nuestro día a día.

Digamos que el ruido mental es esa vocecilla interna que nos agota con una incesante repetición de pensamientos en bucle, como una voz muy persistente que parece tener vida propia y que no cesa.

Esa voz nos bombardea de preocupaciones, inseguridades y tareas pendientes, y, en vez de ser algo útil, al final se convierte en una distracción molesta que nos aleja de la concentración, del bienestar y de nuestros objetivos.

Así mismo, cuando dejas que esa voz se apodere de ti y lleve las riendas de tu vida, empieza a dominarte en todas tus formas, te amenaza, te muestra solamente consecuencias negativas y parece apartarte de ti, dándote órdenes y controlando tus acciones.

Sientes que te identifica, ¿verdad? Todos hemos pasado por momentos de ruido mental. Además, esto lo vemos a diario en nuestras consultas de Zurekin Coach, y es que los clientes suelen llegar saturados mentalmente y con la idea de saber cuál es el problema que necesitan solucionar, pero sin saber hacerlo.

A simple vista, puede parecer sencillo y natural, pero la realidad es que, detrás del problema con el que llegan los clientes, se esconden las causas por las que, hasta la fecha, se sienten bloqueados y no han podido solucionar su problema.

Para que lo entiendas mejor, vamos a compartir contigo un ejemplo profesional que hemos trabajado hace poco tiempo y que refleja a la perfección lo que ocurre cuando aparece el ruido mental en nuestra vida:
A finales de julio, un cliente nos dijo que tenía claro que quería despedir a un trabajador desde hacía mucho tiempo, pero, sin embargo, todavía no se había atrevido a hacerlo.
El empresario tenía claro que quería verbalizar ese despido con total determinación, pero sentía que había algo que él no podía controlar y que hacía que estuviese aplazando esa decisión una y otra vez.
¿Qué le estaba ocurriendo? ¿Por qué no se atrevía a hacerlo si era lo que quería hacer?
El hombre sabía que cada día tomaba miles de decisiones difíciles, que llevaba adelante una empresa, muchos empleados, su propia familia y sus relaciones sociales, sin embargo, no se atrevía a despedir a un empleado, incluso sabiendo que eso era lo mejor para su empresa.

Así mismo, el empresario podía haber tomado el camino fácil; informar a su asesoría para que preparasen los papeles de despido de su empleado y le informasen que ya no formaría parte de la empresa. Todo hubiera sido muy fácil y el empresario no hubiese tenido que enfrentarse a esa situación, lo hubiese terminado todo rápidamente, pero no era eso lo que quería, quería hacerlo él, pero algo le frenaba.

Entonces, ¿qué era lo que le estaba frenando si lo tenía todo tan claro? Pues bien, a priori puede parecer una cuestión sencilla, pero detrás de todo esto se esconden otras cuestiones secundarias que impiden poner en práctica las decisiones que tomamos, como le estaba ocurriendo al empresario.
Lo que ocurre es que, por muy claro que tengamos algo, llega un punto vital en que nos invaden las dudas y nos atrapa ese común miedo a fallar. A raíz de esto, empiezan a bombardearnos un sinfín de preguntas, de pensamientos y de cuestiones mentales que ponen freno a nuestras decisiones y no nos permiten pasar a la acción, sea lo que sea lo que tengamos en mente. Podemos decir que el ruido mental se apodera de nosotros y empieza la etapa de rumiación, que trae preguntas internas como estas (en el ejemplo del empresario, pero aplicables a cualquier situación):

¿Y si me estoy precipitando con esta decisión?
¿Y si luego no encuentro a nadie para sustituir a esa persona?
¿Y si esta no es la mejor manera de solucionar este problema?
¿Y si estoy fallando en algo y no me doy cuenta?

Dudas, dudas y más dudas. Ruido, ruido y más ruido. Y es así como llega el punto de bloqueo, de estrés, de cansancio y de agotamiento físico y mental, además de ese freno invisible que nos impide realizar lo que queremos, como en el ejemplo del empresario.

Como ves, no importa que seas un gran empresario o que estés acostumbrado a lidiar con miles de asuntos difíciles, el ruido mental es algo que puede ocurrirnos a todos en cualquier momento de nuestra vida. Es humano y natural, pero hay que saber que, un ruido mental persistente, solo nos conduce a la duda y al agotamiento permanente, y frena nuestras decisiones y todas esas acciones que queremos emprender.
Esto, a priori, puede parecer cuestión de poca cosa, pero lo cierto es que puede resultar muy desmotivante y convertirse en un grave problema si no le ponemos solución. Porque sí, ¡hay solución!

Antes de seguir, déjanos decirte que, como humanos, es completamente normal que nos asalten dudas e inseguridades, pero cuando eso frena nuestras acciones y se convierte en un bucle mental que nos bloquea y nos limita, tanto en pensamiento como en acciones vitales, debemos saber que ha llegado el momento de trabajar en ello. Solo poniendo acción en resolverlo, podremos allanar nuestro propio camino y encaminarnos de nuevo hacia el bienestar personal.
Nosotros sabemos que hay solución, y estamos aquí para que tú también sepas cómo encontrarla.

Y es que, como decimos; para vivir bien, es necesario apagar el ruido. Porque todos nos volveríamos locos teniendo una radio encendida 24 horas y 7 días de la semana, ¿verdad? Pues eso es el ruido mental. Una radio encendida todo el tiempo, que nos agobia y nos satura hasta el punto de no permitirnos avanzar.
¿Y qué ocurre mientras tanto? Que estamos tan saturados de oír esa radio que todo lo demás se nos nubla y no nos damos cuenta de que se van creando cada vez más problemas alrededor. El ruido no nos permite oír lo que ocurre fuera, por eso decimos que hay que apagar la radio de vez en cuando para poder avanzar bien.
¡Y vamos a enseñarte cómo hacerlo!

¿Quieres saber cómo puedes apagar la radio? Lo veremos en breve, pero antes necesitas analizar la situación y entender qué dos situaciones aparecen en este tipo de casos de ruido mental bloqueante y limitante.

Para hacerlo, vamos a compartir contigo los 2 componentes que podemos observar en el ejemplo que hemos puesto.

¿Qué dos componentes aparecen en una situación de ruido mental?

Pues bien, cuando nos encontramos en un bucle de ruido mental, o de radio encendida de forma persistente, es importante tener en cuenta que aparecen dos componentes básicos:

1.    El problema externo:

El problema externo tiene que ver con los elementos que influyen directamente en cosas físicas externas, como puede ser en otras personas o grupos.
En el ejemplo del empresario, nuestro cliente atribuyó la circunstancia del despido y sus consecuencias como el problema externo que estaba viviendo.

2.   El problema interno:

En el caso de los problemas internos, digamos que los elementos que influyen están en el interior de la persona y tienen que ver con su parte inconsciente, esa que no puede controlar.
En este componente se observan choques de pensamientos, donde intervienen la razón y el deber (tengo o no tengo que hacerlo así), las emociones, los valores y el propio poder personal como líder de la empresa. Así mismo, también influye la preocupación de la imagen que trasmitirá a su familia, a sus trabajadores y a sus clientes.

Como ves, en una situación de ruido mental, se dan dos tipos de problemas; el problema externo, o lo que está ocurriendo fuera, y el problema interno, o la lucha que tiene por dentro esa persona.
Y es por eso que sentimos bloqueo, estrés y freno; porque el ruido mental conlleva un desgaste a doble banda, la de fuera y la de dentro.
Así mismo, y atendiendo a esas razones, el ruido mental puede llegar a resultar un problema, además de una situación agotadora en la vida de cualquier persona, pero recuerda que tiene solución y que muy pronto vamos a compartir contigo algunas claves para transformar el ruido mental y ponerlo a tu servicio.

Motivos por lo que tienes ruido mental.

Ahora que ya conoces qué es el ruido mental y cómo puede afectar a tu vida si no logras controlar esa voz interior, es posible que te preguntes por qué tienes tanto caos en tu mente. Pues bien, una de las razones es la desconexión con tu interior y la falta de regulación (1). ¿Qué quiere decir esto? Imagina que tienes una caja de herramientas completa, pero nunca la usas y dejas que todo el mundo (el exterior) toque la caja y lo deje todo desordenado. ¡Esa es tu mente ahora! Una caja de herramientas que se descontrola con el exterior (los problemas).

Y es que si no usas tu mente (tu caja de herramientas), ella te usará a ti y te contagiará todo ese caos que hay en la caja del ejemplo. Digamos que, si usas tu mente para fines concretos y hablas con tu voz interior para pedirle lo que necesitas, todo irá bien. Sin embargo, si no tienes a tu mente en cuenta y la dejas de lado, ella tomará las riendas y comenzará a ir de aquí para allá, del pasado al futuro, y ocupará su tiempo de esta manera, ya que no tiene otra cosa que hacer, pero siempre permanece activa.

El segundo motivo por el que tu voz interior se alborota y controla tu vida de forma negativa, es la sobrecarga de información y el estrés (2).
Cuando te llenas de información sin cesar, con pensamientos y preocupaciones, tu voz interior puede abrumarse y saturarse, llegando a estresarse totalmente. Es por eso que siempre hablamos de dosificar y ordenar la información que nos llega y que nos quedamos, ya que tener mucha información de forma continua, no deja descansar la mente y la lleva a una sobrecarga agotadora.

Por otro lado, otra de las situaciones que hace que nuestra voz interior pase de ser útil a ser un torbellino descontrolado, son los problemas emocionales sin resolver (3). Cuando tienes emociones reprimidas, traumas del pasado, heridas de la infancia, situaciones desagradables que viviste y las has escondido dentro, lo que ocurre es que tu voz interior queda atrapada en estas circunstancias y te muestra justo eso; pensamientos negativos, preocupaciones y una espiral eterna de voz y ruido. Es como un espejo de ti y de lo que has pasado y reprimido.

Además de todo esto, tienes que tener en cuenta que también hay factores externos que influyen en tu voz interior, como lo son las expectativas que pones sobre las cosas o las presiones sociales a las que puedes verte sometido (4). Este tipo de normas te dicen cómo debes hacer algo, te juzgan por lo que has conseguido o lo que no y te aprietan diciéndote que deberías aprovechar más el tiempo, por ejemplo.
Todo esto alimenta tu caos interno y le da fuerza a esa voz, o ese ruido mental, para cabalgar como un caballo desbocado, dirigiendo tu vida incluso hasta el borde del abismo, donde sientes que ya no puedes más. En este punto pueden aparecer problemas de ansiedad y depresión, que crean ciclos repetitivos de pensamientos y nos llevan a perder la conexión con el momento presente, haciendo que nuestra voz interior salga de control y domine incluso nuestro cuerpo.

Como ves, dejar de controlar esa voz interior solo nos lleva a vivir situaciones perjudiciales tanto para la mente como para el cuerpo, y todo eso desemboca en problemas como los que vamos a contarte a continuación.
Antes de hacerlo, te recordamos que solo estamos dando un paseo por las sendas del ruido mental para que sepas que es mucho más común de lo que creías. Después de conocer todo lo que conlleva, tendrás el poder de decidir transformar tu ruido en claridad mental y mejorar tu vida en todos los aspectos, así que no te rindas. Sigue leyendo un poco más, aprende sobre cómo puede influir el ruido mental en tu día a día para tenerlo claro y después pon acción con los tips que te daremos. ¡Todos podemos hacerlo! Estás solo a un paso de mejorar tu vida.

Ahora sí, veamos:

¿Cómo influye el ruido mental en tu vida diaria?

Ahora que ya sabes cuáles son los principales motivos de que tu voz interna se haya descontrolado y haya aparecido en tu vida el temido ruido mental, déjanos contarte cómo puede influir esto en tu día a día, ya que, normalmente, lo hace mucho más de lo que podemos imaginar o percibir de forma consciente.

Así mismo, el ruido mental dificulta la concentración (1), ya que es una distracción constante que te impide enfocarte en lo que verdaderamente es importante para ti. Podemos ver un ejemplo cuando vamos a dedicarnos a un proyecto, por ejemplo, y, de repente, la voz interna empieza a decirnos que no hemos hecho esa llamada, que lo de ayer no está resuelto, que hemos olvidado hacer esto o aquello, que antes deberíamos mirar otra cosa…
Esto nos aleja de nuestro foco y de nuestro objetivo, restando importancia a lo verdaderamente importante y haciéndonos perder tiempo y enfoque.

Por otro lado, otro efecto de tu voz interna es el agotamiento mental (2), ya que lidiar con un flujo constante de preocupaciones y pensamientos es realmente agotador. Mantener esta situación durante mucho tiempo, te lleva a una fatiga mental que te quita la energía y te aleja de tu bienestar. Es entonces cuando te sientes cansado, agotado y desmotivado y te preguntas por qué te puede estar pasando eso. ¡El ruido mental es el culpable (siempre y cuando puedas descartar otros factores físicos)!

Así mismo, además de todo lo anterior, otro efecto del ruido mental, y uno de los más complicados de llevar, es el insomnio (3). El momento de acostarnos, en silencio y con calma, debería ser un instante de paz y descanso, pero no. Cuando el ruido mental se ha apoderado de tu vida, esa voz aparece con fuerza y te impide relajarte. ¡Vueltas y más vueltas en tu cabeza! Y no duermes bien, no descansas y cada vez estás más cansado. Seguro que te ha pasado, ¿verdad? Pues es momento de revisar tu mente y ver qué puede estar pasando.

Y, por si fuera poco, el ruido mental también influye en nuestras relaciones (4), y es que, cuando una persona tiene mucho ruido mental, le es imposible concentrarse en el otro, en lo que dice o lo que le cuenta, y eso, tanto si nos pasa a nosotros como si le pasa a alguien que conocemos, puede convertirse en un momento incómodo. No estamos presentes, estamos pensando en nuestras cosas, por lo que no prestamos atención a esa persona, perdemos ese instante que nunca volverá y podemos hacer que la relación vaya decayendo por falta de atención y cuidado.

¡Ah, y espera, que todavía hay más! Y es que, cuando tenemos ruido mental y queremos tomar una decisión (5), esa voz interior vuelve a apoderarse de nosotros y nos frena, nos limita y nos bloquea. ¿Estás seguro de que vas a comprarte ese jersey azul cuando el blanco es tu color favorito? ¿Seguro que vas a coger el blanco con lo mucho que se ensucia? Y al final, acabas por no comprarte ninguno, porque tienes un lío mental que te quita las ganas de seguir lidiando con lo que estás haciendo. Así actúa el ruido mental y así es como te limita en tus decisiones vitales.

Y, sí, por último, el ruido mental también afecta negativamente a tu creatividad (6), ya que, con sus ideas contradictorias, es capaz de eliminar incluso las ideas más frescas y desechar buenísimas oportunidades.
Por otro lado, y prometemos acabar ya con los problemas, el ruido mental produce tensión muscular, dolores de cabeza, cansancio y hasta problemas digestivos (7).

Ahora que ya conoces los problemas más comunes que acarrea el ruido mental persistente, y que puedes pensar que son más de los que creías, vamos a ver otro punto importante de forma más positiva; el conocer en qué momentos puede ser útil esa voz interior que llevas contigo a todos lados.

¿Puede ser útil esa voz interior? Rotundamente sí.

Como hablábamos, cuando esa vocecilla interior lleva las riendas de tu vida, te controla y domina lo que piensas y lo que haces con una connotación totalmente negativa y destructiva. Es ahí cuando puedes observar que todos los mensajes que recibes de esa voz, o de ese ruido mental, son amenazas, consecuencias negativas y deberes pendientes, lo que te lleva a esa desagradable sensación de saturación, agobio y malestar tan perjudiciales para ti.

Así mismo, esa voz interna puede llevarte a tener incluso pesadillas y estados de ansiedad o depresión, por lo que no estamos hablando de algo sencillo y de poca importancia, sino justo al revés.
Además, pensarás que es difícil llegar a estados ansiosos o depresivos por tener un poco de ruido mental, ¿verdad? Pues déjanos decirte que es mucho más fácil de lo que crees, ya que, a día de hoy, muchos casos de ansiedad, estrés y depresión se originan de un ruido mental persistente y no solucionado. ¡Fíjate si es importante ponerle solución!

¿Y por qué esa voz nunca se calla?, pensarás. Pues bien, algunos estudios de neurociencia han demostrado que la voz interna tiene una red que se llama la red por defecto, es decir, es como el funcionamiento base de nuestro pensamiento y de nuestro cerebro y se asocia a la autorreflexión, la imaginación y la planificación.
Esta voz interior, bien trabajada, puede incluso ser útil para nosotros cuando nos ayuda a anticipar los peligros, la amenazas o para prepararnos para diferentes situaciones, por lo que es importante que siempre esté activa.
Además, esa voz interior tiene una naturaleza reflexiva que usamos para pensar, reflexionar y analizar situaciones, por lo que puede ser una herramienta muy útil para procesar la información que nos llega, tomar decisiones y aprender del mundo exterior.

Sin embargo, cuando esa voz pierde su color y empieza a ser gris y a sabotearnos por dentro, es necesario que entendamos que está siendo contraproducente e, incluso, perjudicial para nosotros y nuestra vida. Digamos que, cuando esa voz sale de control, puede convertirse en nuestro peor enemigo y resultar imposible de controlar.

Entonces, habrás visto que hay un punto en que, bien controlada y trabajada, esa voz interior es realmente útil y beneficiosa para tu vida, pero es necesario que trabajes para transformarla en una voz tranquila y servicial, que sirva para orientarte y apoyarte en los momentos en que lo necesites. Cuando llegas a ese punto, realmente te sientes bien y puedes confiar en ti, en tu seguridad y en tu sabiduría interior. ¡Y eso sí es realmente maravilloso! Porque te sientes fuerte y confías en tu poder, y eso te lleva a la calma, al análisis equilibrado y, en definitiva, al bienestar.

Ahora que ya sabes que hay un punto en que tu voz interior puede convertirse en ese amigo o amiga que te apoya, te cuida y te refuerza, estamos seguros de que quieres saber cómo puedes transformar el ruido mental para poner esa voz a tu servicio y mejorar tu vida, ¿verdad?
Si es así, ¡no puedes perderte el siguiente post! En él vas a encontrar el método para transformar el ruido interno en claridad mental de forma fácil y agradable.

Porque sí, queremos que puedas encontrar tu propio método para que lleves a cabo tu cambio, sintiéndote en calma, con comodidad y a tu propio ritmo. Por eso, en Zurekin Coach trabajamos el ruido mental desde la cercanía, y no solo te guiamos, sino que te damos la mano para que el camino sea más ameno y divertido.

¿Iniciamos el viaje de cambio hacia tu claridad mental? ¡Verás cómo cambia todo cuando tú decides cambiar! Estás a un solo paso de hacerlo.

Nos vemos en el siguiente post.