ESTRATEGIAS DE LIDERAZGO PARA MANEJAR SITUACIONES Y PERSONAS DIFÍCILES
23 Febrero 2025
¡Hola coachee!
¿Te ha pasado alguna vez tener que lidiar con situaciones o personas que no puedes tragar? Estas situaciones/personas nos generan un malestar continuo y profundo a la vez. Pero, ¿sabías que aprender a gestionar estas situaciones puede transformar tu vida? Cuando aprendes a dar respuestas mesuradas a este tipo de eventos en tu vida, la tensión se disipa y tú te sientes mejor, consiguiendo extender esta mejora a muchas otras áreas de tu vida.
Por eso, si estás pasando por esta situación, te adelantamos que en este post te ayudaremos a identificar qué puedes hacer para liberarte de la tensión que te genera, permitiéndote avanzar hacia tu bienestar y tus metas personales y profesionales.
“Liberarte del agobio es una bendición.” - experiencia propia.
¿Estás preparado/a? Toma lápiz y papel, porque seguro encontrarás consejos prácticos para poner en marcha enseguida. ¡Vamos a por ello!
ÍNDICE DEL CONTENIDO DEL POST:
1. ¿Por qué te cuesta dejar ir lo que no te beneficia?
2. Consecuencias de "tragarse" situaciones difíciles
3. Cómo poner límites saludables sin culpabilidad
4. El poder de la comunicación asertiva
5. Reflexión final: recupera tu paz emocional
¿Por qué te cuesta dejar ir lo que no te beneficia?
Estarás de acuerdo en que todos hemos estado en situaciones o con personas que simplemente no sabemos cómo manejar, ¿verdad? Es algo que ocurre en el día a día de cualquier persona. Y es que, a veces, la ansiedad y el malestar se acumulan y hacen que no sepas por dónde tirar. Pero déjanos decirte que es posible liberarte de esta mochila emocional.
Vamos a ver cómo hacer frente a esas circunstancias y aprender a decir "no" cuando sea necesario para cultivar tu paz interior. Empezaremos con un ejemplo:
Ejemplo práctico:
Piensa en una relación profesional con un compañero de trabajo que siempre interrumpe tus ideas durante las reuniones. Esta situación te causa una profunda frustración y ansiedad. Seguro que te ha pasado algo así y te entra un calor interno por dentro que te lo comerías, ¿verdad? Pues, calma, porque todo tiene solución y ahora vamos a ver cómo podrías abordar esta situación de manera efectiva y poniendo límites de forma clara, precisa y educada.
Veamos: en lugar de acumular ese malestar y reaccionar con ira, vas a aprender a abordar el problema de manera asertiva.
Lo que harías sería lo siguiente:
Durante la reunión, esperas el momento adecuado en el que esta persona te interrumpe y le dices:
"Aprecio tu entusiasmo, pero necesito que me permitas terminar mis puntos antes de interrumpirme. Creo que nuestras ideas pueden complementarse si nos escuchamos mutuamente."
¿Sabes qué podrías conseguir con este sencillo gesto? Al comunicar tus necesidades de forma clara y respetuosa, no solo alivias tu propia tensión, sino que también promueves un ambiente de trabajo más colaborativo y respetuoso.
Ahora bien, si no aprendes a gestionar adecuadamente este tipo de circunstancias y personas, las consecuencias pueden empeorar. Por eso ahora vamos a ver las consecuencias que puede tener no saber gestionar este tipo de situaciones y después veremos las herramientas útiles para que puedas afrontar estas situaciones.
Consecuencias de "tragarse" situaciones difíciles
Antes de entrar en materia, es importante que pongamos los pies en la tierra y entiendas que guardarse todo dentro genera frustración, estrés y puede llegar a afectar tu bienestar emocional y mental. Porque hay una cosa clara, coachee: si sigues aguantando una situación que te desagrada, las emociones que reprimas tarde o temprano explotarán por algún sitio. Y la verdad es que no se trata de evitar confrontaciones, sino de tomar acción consciente para liberarte.
Cuando aguantas situaciones difíciles una tras otra, o cuando aguantas una similar a diario, acabas cansándote cada vez más, acumulando frustración y emociones que te reprimen y te generan estrés y ansiedad. Lo que ocurre es que la bola cada vez se hace más grande, hasta que al final te das cuenta que estás al límite y que no sabes cómo gestionar la situación.
Eso puede afectar a todas las áreas de tu vida, porque lo que te afecta a ti, se entiende a todos los niveles personales y profesionales, por mucho que te parezca que no te afecta. Por eso es muy importante que empieces a tomar acciones conscientes, deliberadas y pacientes que te lleven a la calma, al bienestar y al equilibrio.
¿Quieres saber cómo? ¡Vamos a verlo!
Cómo poner límites saludables sin culpabilidad
Lo primero que debes saber es que aprender a poner límites saludables es fundamental para protegerte. Además, no es necesario ser agresivo ni maleducado/a, sino simplemente establecer tus necesidades de forma clara y respetuosa.
Si no sabes cómo hacerlo, te podemos enseñar de forma personalizada, porque el coaching te guía y puede ayudarte a identificar las causas raíz y a que encuentres tu manera ideal para gestionarlo de manera sana y efectiva. No todas las herramientas son para todos y por eso nosotros lo hacemos todo de forma auténtica e individualizada para ti.
Además, cuando aprendes las herramientas para gestionar situaciones tensas, te permites cuidar de ti mismo/a sin sentirte culpable y esto te beneficia a ti así como a todo tu entorno. Porque de este apartado deducimos algo claro:
"Los límites saludables son la clave para mantener relaciones equilibradas." – Anónimo
En el siguiente punto hablaremos de la comunicación asertiva, que es una herramienta muy valiosa para este tipo de comunicación. ¡No te la pierdas!
El poder de la comunicación asertiva
Hablar de manera asertiva es clave para expresar tus emociones y necesidades sin caer en la pasividad o la agresividad. Diríamos que es una forma de expresarse en la que claramente dices lo que piensas y sientes sin ser agresivo ni pasivo. Es como encontrar un punto medio entre no decir nada y decirlo todo de manera hiriente.
¿Y sabes cuáles son las características de una comunicación asertiva? Primero la claridad para expresar tus pensamientos y necesidades, después el respeto de tener en cuenta los sentimientos y derechos de otras personas, detrás la empatía para comprender la perspectiva del otro, y por último, la confianza que generas mostrando seguridad en ti mismo sin ser dominante ni agresivo.
Sin embargo, cuando tu comunicación es pasiva, evitas decir tu opinión por miedo a mostrarte ante otras personas y te lo tragas todo. Dices lo primero que te viene a la mente sin filtro de manera ofensiva y dominante y la mayoría de las veces hieres a las personas. Digamos que eres como un volcán en erupción que arrasa con todo, con personas desagradables y con las relaciones que realmente te importan.
Por último, cuando comunicas de forma asertiva, expresas tus necesidades y opiniones de forma honesta y respetuosa y te permite dejar claro lo que necesitas sin herir a los demás.
Vamos a ver 1 ejemplo: A) Respuesta agresiva - B) Respuesta asertiva
- ¡Siempre metes la pata en el mismo sitio! ¿No puedes hacer nada bien?
- Me fastidia mucho cuando las cosas no salen como esperábamos, ¿Podemos revisar juntos que ha pasado y cómo mejorar para la próxima vez?
¿Ves cómo cambia la forma de enfocar y entender la situación? Por eso decimos que comunicarte de forma asertiva es una herramienta poderosa para construir puentes y no muros. En la opción B) además de comunicar que las cosas no han salido como se esperaban, involucras a la persona para encontrar soluciones juntos y mejorar para la próxima vez.
Te animamos a poner en práctica lo aprendido en este ejemplo cuanto antes y, con paciencia, poder observar cómo empieza todo a cambiar. Te aseguramos que es muy satisfactorio practicar este nuevo enfoque vital porque te beneficia a ti, a los tuyos y a todas las áreas de tu vida en general.
¿Vemos ahora la última parte?
Recupera tu paz emocional
Ya estamos llegando al final del post, coachee. Pero antes de terminar, vamos con un tema super importante para recuperar tu paz interior.
Liberarte de las personas y situaciones tóxicas es un acto de amor propio, pero el trabajo no está en los demás sino en ti. Por eso es importante saber gestionar estas situaciones que tanto te agobian, porque tienes todo el derecho a cuidar de tu bienestar y de poner límites cuando sea necesario.
Hazlo por ti mismo/a, y tu vida cambiará en formas que no imaginabas.
Ahora imagina tu vida como un puzzle, cada pieza representa un aspecto importante: tu trabajo, tu familia, tus amigos y tus propios sueños y necesidades. Al principio, puede parecer que algunas piezas no encajan, que hay desorden y frustración, sin embargo, al tomarte el tiempo de observar cada pieza y entender dónde pertenece, comienzas a ver la imagen completa. Algunas piezas, las que no te benefician, simplemente no tienen cabida en el puzzle de tu vida, así que al reemplazarlas con aquellas que te aportan paz y alegría, el resultado es un cuadro armonioso y lleno de significado.
Por eso decimos que, si dejas de “tragarte” lo que no te beneficia, tu vida se transformará increíblemente. Porque cuando te pones primero, no estás siendo egoísta, sino que estás cuidando tu salud emocional. Además, si tomas el control, lograrás avanzar hacia tu bienestar y objetivos. Y estoy segura de que este post puede ayudarte a empezar el camino y a cultivar ese primer cambio que necesitas en tu vida. ¡Te animo a ponerlo en práctica!
Y, para finalizar, recuerda que no estás solo/a. Aquí tienes una mano amiga dispuesta a guiarte y apoyarte para que consigas esa paz emocional que te mereces: porque vida no hay más que una.
"El bienestar es una elección, no un accidente." – Dr. Dyer